La creatividad consciente: transformando ideas en realidad

Todos hemos tenido momentos en los que una avalancha de ideas impresionantes invade nuestra mente. Estas ideas parecen ser la clave para algo grandioso, pero a menudo se desvanecen antes de convertirse en algo tangible. La creatividad consciente es un enfoque que puede ayudarnos a dar forma y estructura a esas ideas, permitiéndonos transformarlas en realidad.

¿Qué es la creatividad consciente?

Este término se refiere a una forma de creatividad que no solo se basa en la generación de ideas, sino también en la capacidad de llevar esas ideas a la práctica de manera efectiva y consciente. Este enfoque implica verlo de una forma transdisciplinar, o sea que abarque múltiples y diferentes disciplinas, y un enfoque sistémico para así considerar la interconexión de nuestras acciones, pensamientos y emociones.

En otras palabras, este concepto se basa en la idea de que para ser verdaderamente creativos, debemos estar profundamente conectados con nuestro ser interior y con nuestro entorno, para de esta forma transformar la creatividad en -algo-. Esto implica un desarrollo continuo de la conciencia personal y social, lo cual nos permite reconocer y aprovechar nuestro potencial creativo en todas sus dimensiones.

Pero… ¿por qué a veces cuesta tanto llevar las ideas a un plano tangible?

1. Miedo al fracaso

El miedo al fracaso es una barrera significativa para muchas personas. Este miedo puede paralizarte y hacer que dudes de tus capacidades. Cuando anticipas que algo puede salir mal, tu cerebro puede optar por evitar el riesgo y, por ende, no actuar.

2. Perfeccionismo

Si esperas que todo sea perfecto antes de empezar, es posible que nunca te sientas listo para dar el primer paso. Este deseo de perfección puede retrasar o incluso impedir la implementación de tus ideas.

3. Falta de claridad en los objetivos

A menudo, las ideas pueden ser vagas o poco definidas, lo que dificulta la acción. Sin objetivos claros y específicos, puede ser difícil saber por dónde empezar y cómo proceder.

Pasos para fomentar la creatividad consciente

1. Conexión interior

Técnicas de relajación, meditación y visualización son herramientas poderosas para fomentar una conexión interior. Estas prácticas nos permiten sintonizar con nuestro ser más profundo, facilitando la emergencia de ideas creativas y su posterior materialización. Te dejo acá un playlist de Spotify con mis canciones favoritas para meditar.

2. Autoconocimiento

Para desarrollar la creatividad consciente, es crucial comenzar por el autoconocimiento. Estrategias como la "Rueda de la Vida" y el “Ikigai” ayudan a identificar fortalezas y debilidades, promoviendo una reflexión profunda sobre nuestra identidad y sistema de creencias. Te dejo aquí la plantilla para el primer ejercicio y el segundo, y una adicional llamada “Tus deudas y las mías” para ser bastante críticos con lo que nos hemos creído por años y empecemos a despedazar lo que no nos funciona.

3. Definición de la idea

Cuando se te ocurra algo, trata de ver cómo lo puedes poner en una caja o varias, de manera hipotética claro. Una buena técnica para esto es la que llaman “Walt Disney”, donde se divide el proceso de desarrollo de ideas en tres roles: el soñador, el realista y el crítico. de esta forma puedes soñar libremente y generar ideas sin limitaciones, para luego evaluar cómo puedes hacer que las ideas del soñador sean prácticas y realizables. Por último, examina las ideas desde una perspectiva crítica, identificando posibles problemas y soluciones. Itera entre estos roles hasta refinar una idea sólida y viable. Te dejo la plantilla para el ejercicio acá.

4. Diseño de objetivos

Apenas tengas una idea, no dudes en definir claramente objetivos. Inclusive si tu objetivo es únicamente aprender algo nuevo, eso es suficientemente válido como para considerarlo una meta. No siempre tienes que convertirlo en un negocio o en un éxito en redes sociales. Utilizar modelos como "WOOP" y "OKR" te puede ayudar a transformar ideas abstractas en proyectos concretos y accionables.

5. Curiosidad activa

Cultivar la curiosidad de manera intencional al exponerse a nuevos temas, explorar campos fuera de tu área de confort, y hacer preguntas constantemente. La curiosidad es el motor de la creatividad, estimulando la mente y fomentando la generación de ideas frescas.

La creatividad consciente es una herramienta poderosa que nos permite transformar nuestras ideas en realidades tangibles. Al desarrollar nuestra conciencia y aplicar estrategias específicas, podemos superar las barreras que nos impiden materializar nuestro potencial creativo. La clave está en integrar mente, cuerpo y espíritu, permitiendo que nuestra creatividad florezca de manera holística y sostenible.

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Y si no hago resoluciones en enero, entonces ¿en qué me enfoco?